Era el año 1996 y Nintendo ya era un coloso de los videojuegos. Ese año se lanzo la Nintendo 64, la gran apuesta de Nintendo para competir contra una novata la Sony Playstation, y la Sega Saturn. Sin embargo en todo el mundo Nintendo llego a vender 33 millones de unidades, mientras que la Playstation vendió 104,25 millones de unidades, de aquí sale la interrogante ¿Cómo una empresa con experiencia en la industria pierde tanto mercado ante una empresa recién llegada?
Todo esto empezó en
1988, año en el cual Nintendo y Sony comienzan a trabajar en conjunto por un
dispositivo que permitiría a la SNES funcionar con CD’s. En aquel entonces la
tecnología del CD era totalmente innovadora: más barato que el cartucho, más
compacto y con más almacenamiento, pero le faltaba desarrollo. Tras problemas
técnicos en el desarrollo, y algunas idas y vueltas: Nintendo finalmente no ve
el proyecto de la SNES CD como un negocio redondo, por lo que se descarta, lo que finalmente rompe con la sociedad entre Sony y Nintendo.
Con todos esos años
de desarrollo Sony aprendió (y aprendió bien) sobre la industria de las
consolas y finalmente en 1992 sale a la venta la Playstation, la famosa consola
gris de 32 bits creada por Sony. Por otro lado en 1994
Nintendo saca a la venta su Nintendo 64, otra consola histórica que no necesita
presentación alguna. Ambas consolas tienen grandes títulos (algunos de los
mejores de la historia), la consola de la gran N gráficamente era más
poderosa que la PSX, pero los cartuchos ya era un formato inferior al CD. Sony
supo ver que era tiempo de los CD’s, su gran capacidad les daba a los
desarrolladores la posibilidad de crear juegos más ambiciosos.
De alguna manera lograron meter el Resident Evil 2 en un cartucho, muy bien hecho. |
La limitación del espacio de los cartuchos le ha costado... por ejemplo: Final Fantasy VII. Square Enix se negó a desarrollar dicho juego para Nintendo 64 por la limitación que le imponían los
cartuchos a su nuevo juego, con lo que Sony se quedo con uno de los mejores títulos de dicha
saga. Afortunadamente las sagas propias de Nintendo (entre otras) han podido
sacar la consola adelante, y a pesar de algunas dificultades, la Nintendo 64 ha
pasado a la historia con gran cariño por la comunidad gamer y no en vano.
No es para sacarle méritos a Sony, pero es un hecho que la
piratería ayudo a que la consola gane popularidad por encima la Nintendo
64. Nintendo trabajó muy duro por crear cartuchos difícilmente "pirateables".
Sony por su parte: no le prestó demasiada atención a este asunto y en
consecuencia: al poco tiempo habían Playstations chipeadas y corriendo copias
piratas de su catálogo (en Argentina cualquier juego de PSX podía conseguirse a $5, contra los
$50 que costaban algunos cartuchos).
Al final de cuentas ambas consolas empatan en valor
nostálgico y en títulos de gran relevancia, pero Sony pudo
ganarle mucho mercado a una grande como Nintendo (líder indiscutible en el sector), aproximadamente 70 millones
de unidades más, y en los negocios los que mandan son los números. Además queda como claro ejemplo a que una maquina tan buena y tan competitiva como la Nintendo 64 quedó en segundo lugar por una mala decisión: seguir utilizando cartuchos, cuando sus competidores utilizaban CD's. Igualmente siempre se le agradecerán a ambas por traernos tantas alegrías cuando éramos más pequeños.
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