¿Qué dificultad eliges?

La idea de que los videojuegos son cada vez más fáciles es una idea ya aceptada entre los jugadores. Que los juegos te lleven de la mano como si perderte y explorar por el mapa sea un pecado gravísimo, o que un juego se vuelva insufrible haciéndonos retroceder al mismo punto una y otra vez por una dificultad elevadísima, ¿Qué elegirías?

La mayoría diría que quieren una dificultad bien ajustada, que el juego les proponga retos  y poder llegar a un final satisfactorio, mientras que los “hardcore” dirían: "no importa lo difícil soy hardcore y puedo con todo", y por ultimo siempre está el grupo que solo quiere divertirse un rato, y todo lo demás puede irse al carajo. La industria ha crecido exponencialmente, se invierten millones para crear un titulo de primera línea y por supuesto quieren sacarle provecho, la tendencia más común es hacer que el juego sea amigable con el jugador, y muchas veces se cae en llevarte de la mano a través de la historia.

¿Pero los juegos difíciles son poco exitosos? Para nada, la saga Dark Souls (alerta de ejemplo obvio) es muy exitosa a pesar de ser una saga muy hija de puta difícil, y hasta se añora en muchos casos los retos que nos proponían juegos de antaño que por más bueno que seas un error te podía costar bastante tiempo invertido (y un joystick), por ejemplo Punch Out! De NES te ofrecía un reto distinto en cada pelea, y llegaras hasta donde llegaras era sumamente satisfactorio como juego (a menos que perdieras con Glass Joe, si lo hacías eras manco de verdad).

La edición preparate a morir, eso lo dice todo

Un punto muy importante para todo juego son los jefes, crear jefes diversos, desafiantes y divertidos de enfrentar es algo que todo diseñador de videojuegos debe plantearse. Un jefe decepcionante puede llevar a un juego decepcionante, o un jefe imposible puede hacer que muy pocos tengan ganas de seguir jugando; Por ejemplo un jefe decepcionante fue el jefe final de Gears of War, igual a los monstruos que enfrentamos en todo el juego pero con más vida, un mejor arma y más protección.

Algo a que prestar atención es a la inteligencia artificial, sin ella no es posible crear un reto propicio para el jugador. Puedes meter 5, 10, o 500 enemigos pero sin una buena IA todos esos enemigos caerán ante cualquier jugador, como el clásico ejemplo de los guardias del Assasin’s Creed que atacan por turnos. También están los bugs, el pan nuestro de cada día, algunos son bastante cómicos y puede quedar como una buena anécdota, sin embargo otros pueden arruinarte la experiencia por completo.


En conclusión no puede establecerse una dificultad media, y quien no lo pase no puede ser gamer, sino que cada videojuego debe tener sus propias opciones para ajustar la dificultad al gusto de cada jugar, por ejemplo activar o desactivar el auto-apuntado, desactivar la auto-regeneración de vida, etc. En fin ni juegos fáciles para principiantes, ni juegos imposibles para unos pocos: retos adecuados y divertidos para todos.

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